Archive for the ‘Sexo’ Category

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Geopolìtica

2010/01/20

En el piso.

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Entre Canibales

2010/01/12

El placer tiene colores de mundos distantes, intensidades, despues resulta que una ya no es una, descubres que puedes nadar en un desierto de torres, de multitudes preñadas.

Descubrí mi belleza mientras dormía, cuando ya la vida era nocturnidad desconfiada.
La piel podría confundirse, en mis ojos desprovistos de pureza, con luz que entraba desde el rincón, el aliento que sale hacia los muslos soñando con la ciudad de afuera. Para cuando me traslade con un giro pequeño, era tarde, porque mi cuerpo se había poseído del fantasma eterno del olvido; empezaba justo en la boca, regaba su fluorescencia aprovechando la curvatura de los hombros hasta llegar a los dedos, aquí lo detuve capturándolo en un suspiro de vientre, improvisado o premeditado, no importaba porque estaba justo en el comienzo, en el labio que levantó la sombra que me cuida.

Interminable fuego.
Dobles de mi
Triples de el

¿Amigos ? ¿Amantes?

En el exceso, los cuerpos encontramos las respuestas.
Diluirse, verterse hasta corromper el aire.

Mía: así te llamas.
¿Qué más harmonía?
Mía: luz del día,
Mía: rosas, llamas.
.
. . . .¡Qué aroma derramas
En el alma mía
Si sé que me amas,
¡Oh Mía! ¡oh Mía!
.
. . . .Tu sexo fundiste
Con mi sexo fuerte,
Fundiendo dos bronces.
.
. . . .Yo triste, tú triste…
¿No has de ser entonces
Mía hasta la muerte?

Mia, Ruben Dario,

de Prosas Profanas y otros poemas

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Indiferente

2009/09/05
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Sòlo los pescadores que tienen la fuerza para cargar la red , el olfato par distinguir un buen bajo y la paciencia para preparar el anzuelo son los que se cumplen del mar a la mesa.

 A un pescado una vez en el bote, es necesario sacarle las escamas, cortarle las aletas y adobar la carne para meterla al carbòn. Extensa tarea que sòlo tiene incertidumbre.

 El gusto no tiene medida.

Prefiero una elecciòn que venga del paso efìmero e impulsivo. Ahì donde esta la sombra del centro, la penumbra de una vereda, en cualquier estrechez.

Al dìa siguiente hay que caminar de vuelta al agua buscando frescura. Esperando las ansias lentas para ser tragadas y enmudecer la piel.


Tu placer es lento y duro
viene de lejos
retumba en las entrañas
como las sordas
sacudidas de un volcán
dormido hace siglos bajo la tierra
y sonámbulo todavía.
 Eròtica, Cristina Peri Rossi 
 

 

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Mareo de tierra

2009/07/08

El equilibrio entre el deseo real y el deseo posible, el que imagino, el que provoca constante humedad. Mas allá de toda metáfora  traído por las olas del sueño a la orilla de todas las realidades;  está  el saber que la tijera con que cortamos  nuestros ojos es una víscera feroz y un vientre insaciable. Y se queda con nosotros esta revelación y rechazamos aceptar las verdades  de las que no se bañen nuestros fluidos.

Los espacios se corrigen a si  mismos, los devuelvo al paseo del devenir  de de esa noche con sustancias en que gané sensaciones y soy  el objeto en el que permanece el deleite. El pudor  ahora es sòlo una carta descartada.

El olor ha quedado en la ciudad, vuela e inunda la atmósfera  de las calles. Me llega  como el veneno de ese cuerpo,  me toca  y me incita desde el cortex.

 Una señal en mis rodillas color violeta, un tono ardiente y de mordaza en ellas, que me acerca al placer brutal de su fugacidad  hasta que la piel retorne a su color.

Seguramente el paraíso es una orgìa constante y mientras  Dios observa cómo su creación se aparea, el en su soledad celestial se complace frente a un espejo.

Cuando estaban sanas

cuando estaban sanas

 Este es otro personaje de los que  conocí pequeña. Cuando robaba líbros en mí propía casa.

» La subo sobre mí y, mientras las cuerdas me resuenan en los oídos; la habitación está obscura y la alfombra pegajosa con el kümmel derramado por todas partes. De pronto, parece como si se acercara la autora: es como agua arremolinándose sobre el hielo y el hielo está azul con la bruma que se alza, glaciares hundidos en verde esmeralda, gamuza y antílope, meros dorados, morsas retozando y el ambarino lucio saltando sobre el círculo ártico… Elsa está sentada en mis rodillas. Sus ojos son como ombligos diminutos. Miro su enorme boca, tan húmeda y brillante, y la cubro con la mía.

Henry Miller
Trópico de Cáncer (fragmento)

 

 

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Fuga y Misterio

2009/07/03

Walterio es quién inventó esa mecánica masculina de romper con lo cotidiano; burlar el calor, la misma sopa del almuerzo, los parlantes del vecindario y el amor viejo de las familias; que toma una evidencia nauseosa particularmente ese día. Era cuestión de desaparecer temprano y volver a la hora de almuerzo, dictada siempre por cualquier órgano, que nunca era el estómago. Aquel domingo regresó con un disco y una hamaca que colgó en nuestro pequeñísimo hall de la entrada y me dijo: Ven, acuéstate y escucha.

Mi padre siempre retorna del sueño en casa, de la fantasía sensible a la cama limpia y la mesa puesta. Se me ocurre el recuerdo porque ahora creo que fue este principio de un entrenamiento, que hoy es el combustible que me deja disfrutar del viento en la cara.

Tenía doce años cuando conocí a Piazzolla y el sonido de bandoneón con el que aburro la casa en épocas saludables como esta.

Me doy cuenta de que la mano puede extenderse para hacer de esta bitàcora un cuaderno rosa con perfume que marea. Entonces sigo la corriente, que es algo que me encanta,  haciendo el intento:

Querido Diario, ayer estaba caminando… no, que va.

 Querido Diario, caía la noche en mi ciudad… horrible.

Querido Diario, como siempre sucede en Guayaquil… Me rindo, todo lo que pueda decir no es pensado.

 

Ver, oir y callar es la receta que nunca falla.  Si para cuando se hizo esta belleza de video yo ni nacìa.

 

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Ojos bien cerrados

2009/06/22

Es inevitable. Llegó el día de completar este post.

La infidelidad existe porque existe la pareja.

Un hombre  infiel es un ser productor  y debe ser evaluado bajo esa lupa y calificado como tal.

La boca y la mente como un sembrío, se llenan de flores y las cosechas  un espectáculo. 

Sin ser un objetivo propuesto la búsqueda del perdón transforma el hecho en un acontecimiento benigno. No hay nada que un hombre infiel no haga y  el amor cobra peso, cobra sentido, adquiere fuerza.

Lo  que siempre supe era de cuando me guardaron fidelidad. Porque me la guardé yo misma.

Tuve algunos años montada la KGB, Scotland Yard y CIA juntas todos los días a cada hora. No existía  teléfono, clave de correo, archivo, computador portátil, diario, agenda que se escape de mí.  El individuo víctima se dejaba vigilar, la persecución era seca y constante.  A riesgo de describirlo exageradamente, al hombre no se lo dejaba ni ir al baño sólo.

De esta historia me sentí culpable por mucho tiempo. Hasta ahora, en que para cambiar el curso del destino y reivindicarme con la civilización decidí  no ser madrastra,  bajar la guardia.  Tomar la prueba de las telenovelas;  exigir la confianza, la sinceridad  y el respeto.  Grave error.

Tuve mi visión de mensajes de texto y descubrí que sòlo el comportamiento cavernícola permite tener a salvo la vida. Puedo dejar abierta la mano y otorgar perdón,  porque por ahì corren unos vientecitos en los que cualquier ego puede levantarse.  Las mentiras que nos ayudan a ascender  de categoría.

No existe el crimen perfecto señores.  En algún momento es ese mismo el que abre la caja de pandora, el que desbarata  las hileras del dominó.   A veces es tan simple como volver a armar el rompecabezas, otras  es el pisotón de una mina personal  y no hay marcha atrás. 

 Durante el litigio del caso una puede mirar a la vida con  el viento de los arrastrados. Nada como un hombre de rodillas, que llora y lo persigue a uno por la calle. Nada como los mensajes que me llegan y pongo delete, nada como las llamadas que rechazo o aquellas en las que pronuncio un monosílabo. Nada como una cachetada recibida con humildad. Nada como olvidarlo, dejarlo pasar, dejarlo ir.

La señora Petita, mi vecina que quemó el pecho de su esposo con un caldo de patas caliente, decía cuando alguien le preguntaba si lloró: “las lágrimas las  para cuando muera mi padre”.

Las tardes en la emergencia pueden ser amenas, porque en Esmeraldas a la mujer infiel se la baña en ají.  La última vez con mucha fortaleza me aguante la carcajada para poder administrar el antihistamínico.

En Puerto Cacho, capital de la isla mugrosa de Sta. Cruz, lugar de mis rabias silvestres, no es extraño una caída de machete, he intentado practicar su uso y me hace ampollas en las manos.

 La monogamia es un defecto y Lorena Bobbit una visionaria.

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I believe

2009/06/22

Créeme cuando te diga
que el amor me espanta
que me derrumbo ante un «te quiero dulce»
que soy feliz abriendo una trinchera.
créeme, créeme
porque así soy y así no soy de nadie

Vicente Feliù

La perversión de engranar sustancialmente en un cuerpo de persona como un ángel. Al amor hay que darle imágenes.
Dejar perder la alucinación en la respuesta, en sus formas, en sus versiones. El amor necesita de su intérprete.
Desorden de petición en el pedazo del movimiento que encuentra sosiego. El amor exige agonía.
El hermoso pan del individuo convertido en migajas secas que no alcanzan. El amor tiene impresa la generosidad.
La estampada cadena de argollas que se enroscan. El amor y la pertenencia viven juntos.
El camino de los colores con paso de espaldas a través de nubes. El amor quiere ser fantasía.
Contando luces y sobras de espera. El amor y la caridad son hermanos.
Puñaladas que no penetran, balas alrededor. El amor respira en el perdón.

Son estas todas mis razones.

El club de los soñadores toca mi puerta a cada instante y yo  se la cierro en la cara como si fueran delincuentes. Los entes poderosos y confiados en la carretera que dan miedo.

Me preguntaron si ya no creía en el amor. La pregunta que en otro momento me habría parecido cómica, me hizo llorar, a causa del interlocutor y de la vida.

Una batería de inmuebles se necesita para profesar esa creencia. La ambición desmedida de quien quiere amar, el agujero sin fondo, no se puede esconder ni huir de él.

Si bien tuve una respuesta. La verdad todavía no la conozco. Las lágrimas son las compañeras que ayudan a salir del paso con los curiosos visitantes.

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Aprendamos

2009/06/17

Hace tiempo que no cocinábamos asi que decidimos preparar mi pastel de cumpleaños con anticipación. Arranquè la pàgina del libro con la receta y al rato nos dimos cuenta de que iban a faltar ingredientes. Las soluciones no se hacen esperar y adquirimos lo necesario.

 He mezclado todo. ¿Trajiste el frasco?
Si lo metì sola en la bolsa, porque es muy poco probable que él hubiera querido.                                                                                                                                            En tus cinco centavos con ese frasco tengo yo mi centavo con el mìo, recuerda que las especias siempre se ponen como juntas y estas de acà creo que hasta tienen la misma familia.
Mmm…. no importa.
Claro que no importa, no importa y por eso pasa.

Oye vamos a cocinar algo salado esta vez.
Dale.
No encuentro nada y estoy enferma.
Hoy no me puedo acercar al horno.
Vaya, veo algunas cosas. Mi visión nocturna sorprende, hay un frasco conocido y brillante.
Mira ! Es el mismo ingrediente que quedó perfecto la última vez de tu cumpleaños! ¿ Te parece?
Creo que no tenemos experiencia en esto.
Todo nos queda muy caliente.

¿ Por què no intentar?
Es verdad. Aprendamos.
Si Aprendamos.
Pudiste prender el horno?
Si.
Que alegría . Me siento muy orgullosa de ti.


Cuando esta canciòn saliò nosotras tenìamos un añito de nacidas, pero ya sabìamos si.


 

Pisa el acelerador… que tengas suerte
Pisa el acelerador… no te despidas
Pisa el acelerador… vive tu vida
Pisa el acelerador… con entusiasmo
Pisa el acelerador… hasta el orgasmo
Pisa el acelerador… no te resistas
Pisa el acelerador… a la autopista
Pisa el acelerador… ven!, que te espera
Pisa el acelerador… la carretera

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Vamos a faltarnos el respeto!

2009/05/05

Algunos  lo subliman. Por acá no.

Ella tan Mala en su Calle 13.

En un disco sale un track que se roba la noche y deciden humanizarlo, con lo de que es la canción de alguién, esta vez mi total e indeseable turno. Vaya asunto!  Por suerte  me encantó, sobre todo por aquello que venía pensando hay que apretar las teclas para hablar de ciertas cosas, es decir para no gastar inspiraciones de energía exclusivamente física, o si se trata de ello es mejor ser un delincuente.

 

Puedo nutrirme escuchando esto sabe

que tu me ta escuchando ahh.

Vamo’a faltarnos el respeto.

Mira, yo… quiero un hombre sin complejo.

Que tenga buenos reflejos, pa’ ver como se hace viejo.

Miro el horóscopo pa ve que me depara, cuando me pongo perra tu nada me para.

Esta búsqueda de mi demonio me tienes con insomnio como plaga (con picante como tikka masala) aha…

Yo soy mas bien normalita, ok? una mijita honrada.

Llevame a la cueva de los pelos arrastrando, no me dejes ni hablar.

Vamo’a faltarnos el respeto usando el alfabeto completo.

.

Cuando lo hundo hasta lo mas profundo me vengo rapido como en… (5 segundos)

Yo te quiero decir cosas bonitas mamita pero no me sale, es que yo fui criado por los animales sin modales.(mamando teta de orangutanes)

 

Vamo’a faltarnos el respeto usando el alfabeto completo.

Me sabe mejor lo que no me da que lo que me da hay pápa de lo que tu tiene pa’ mi, tengo que gritar yo estoy en libertad, vamo a ponernos a llorar.

Oyeee anormal jaja, Bellaco, cabrona!, desgracia’o!, estupida!, mal polla!, Gamberra!, huevon!, imbecil!, jinetero!, ticaca!, ambrusio!, mala!, Calle 13!, mala! Calle 13! mala mala!, Calle 13!, oye, jaja… mas te crece, calle 13, mala?

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Strangers in the night

2009/02/23

 

 Se sabe el nombre de la chispa que salta y comparte su holganza con el proscrito ordinario,  venida del deseo  de tener un cisne salvaje, tibio, ocasionalmente, entre las piernas, no como virtud ni como albur, sino que fuera recogida, en la sombra depuesta, en  las palabras encendidas  que son el fuego de otra especie, en el entusiasmo de  las  manos, en las muertes y bienvenidas de mis tantos.

Sombra y palabra. El claroscuro del  cuerpo bajo la marca de la mirada.

Hemos vuelto al tiempo de la Reina de Espadas. Y ella nos dice que la casualidad es un tiempo que no vuelve, una forma de vivir que ya nos abandonó.

El cielo impúdico perdido en  el paraíso  de las calles. Se disfruta el soplo que evoque en cada tajada el desconocido mecenas.

Las buenas noches del lado fantasma.  No dejarlas perder como un cumplido al delincuente, a mi misma y a la coincidencia. Darse cuenta de que aunque corto y desconocido, no hay ciclo fácil para hacerlo salir.