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Un viaje a través de la locura

2009/01/20

Un día Mary trato de cerciorarse de mi amor por ella mediante una prueba definitiva. Se cubrió de mierda y aguardó mi reacción, pues estaba absolutamente segura de que su mierda no podía repugnarme. Cuando, sin sospechar nada entré a la sala de juegos y me abordó una Mary Barnes hedionda que parecía salida de una historia de terror, el horror y el asco me embargaron. Mi primera reacción fue la huída. Me alejé a grandes pasos, lo mas rápidamente posible. Por fortuna no intentó seguirme. Habría sido capaz de golpearla.
Recuerdo muy bien mi primer pensamiento : “Es demasiado, Dios Santo. Estoy harto. A partir de ahora, que se cuide sola. No quiero tener nada mas que ver con ella”.

Luego Berke reflexiona y se dice que, después de todo, si el no se hace cargo, su relación con ella terminará; no quiere que así sea. Este argumento no admite réplica. Sigue a Mary Barnes, con no pocas reticencias.

“Mary permanecía en la sala de juegos, cabizbaja y bañada en lágrimas. Farfullé algo así como: “ Vamos, no es nada. Subamos y tomemos un buen baño caliente “. Se necesitó al menos una hora para lavarla. Su estado era lamentable. Tenía mierda por todos lados, en el pelo, por debajo de los brazos, entre los dedos de los pies.

A los 42 años, la enfermera Mary Barnes, ingresa al centro de recepción de Kingsley Hall para personal asistencial con trastornos mentales, inaugurado en 1965 y cerrado el 31 de mayo de 1970. Pasará en el cinco años y esta historia es la escribió junto con su terapeuta. CF Mary Barnes y Joseph Berke . Two Accounts of a Journey Through Mandess.

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Aquí Joseph Berke y Mary Barnes

La descripción anterior es una de las escenas psiquiátricas mas claras y básicas, del estudio de la locura. Desaparecen todas las sensaciones. Un sentimiento es mas fuerte a los demás y en eso se cree completo. En la foto, los protagonistas.

Cuando fabricó la prueba tenía una certeza dulce, una paciencia otorgada, una deuda que creyó le iba a ser pagada. Obtuvo la condena lastimera.

Entonces:

¿Fue engañada?
¿Deliró sola?

El reacciona al verla llorar. ¿ Por qué?

Por haberle hecho creer que si era capaz.
Porque no hubiera podido lidiar con la culpa de dejarla ahí.

Lo que ella esperaba, no ocurrió. Toda su seguridad era únicamente un delirio y así lo supo.

Alguien sano, la dejaba. Finalmente habría llorado un buen rato, jodido a alguna gente y a si misma, luego se levantaba, se bañaba, porque ella y solo ella, sabía como se lleno de excremento.

La mierda es la mierda.

Y, el amor no es ni tan ancho, ni tan bello, ni tan triste, ni tan sabio, ni tan solo, ni tan loco, ni tan todo, ni tan nada.

No hay que preguntarse porque nos volvemos locos, sino, porque no.

¿ Qué creen?